He leído con detenimiento la carta que José Rivera Damirón (Checheo) le ha enviado a la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte) ha propósito de sus intenciones e interpretaciones de cómo debe ser el Premio en honor a su progenitora, Casandra Damirón.
No sabía que era tan beligerante la participación de los familiares de Doña Casandra en la resolución de los Premios originados para reconocer el talento y desarrollo de los artistas criollos, también donde se hacen votos en beneficio de artistas extranjeros.
La correspondencia de Checheo, a quien conocemos por ser una persona de bajo perfil incluso en reuniones donde llegamos a participar como directivo de Acroarte a la hora del conteo de votos o selección de Soberanos él no tomaba la palabra.
En esta ocasión Checheo expresa el sentir de él y su familia en torno al trato que se les ha dado en algunos momentos del montaje de los premios e incluso en cuanto a beneficios que deben tener los miembros de Acroarte que ha mi modo de ver sólo dan vida a su gremio cuando hay una fiesta en Navidad o cuando se montan los Casandra.
Entre los puntos que plantea a Acroarte la familia Rivera y que se hacen públicos hay algunos que vale la pena analizar aquí:
Es cierto que en Acroarte se olvidan por falta de un protocolo profesional no sólo de tener en lugares privilegiados a gente como los familiares cercanos a Casandra Damirón, sino a personalidades que son soporte y apoyo a la institución en momentos determinados.
El alegato es que y en parte tienen razón las directivas que manejan los Premios que no hay asientos privilegiados para todos y que los nominados deben tener preferencia.
Sin embargo hay que plantearse que esta no es una premiacion personalizadas, sino artística y que los sentimientos individuales no se deben mezclar con la organización de un evento de esta naturaleza que de hecho está matizado por rendir homenaje a una figura emblemática del arte por tanto debemos significar que eso está primero.
Oh en los Oscar u otros premios allende los mares, cuales familiares hay allí de estos si es que existieron esos nombres.
En cuanto a beneficios que plantea nuestro amigo Checheo que deberían tener los miembros de Acroarte, estos no existen porque históricamente allí se maneja todo en el inmediatismo y sólo se piensa en la fiesta de Navidad y en los Premios Casandra.
En nuestro caso particular, por mucho tiempo he planteado que se venda un seguro médico a los miembros de Acroarte , no que se regale, que se lleven a la práctica acuerdos con universidades para profesionalizar a los cronistas, aunque en el caso de Cervecería Nacional Dominicana y el Teatro Nacional siempre se han realizado cursos especializados para los periodistas y locutores miembros de Acroarte, pero hace falta más para fortalecer la ética de todos sus miembros, incluyendo sus directivas.
En Acroarte se han ido poniendo dietas las últimas directivas y ahora se otorga un premio en metálico, un reconocimiento y otros privilegios que tienen algunos directivos, elementos de discordias que han originado controversias porque aunque son ínfimos privilegios allí no hay capacidad para entender algunas cosas, en muchos casos.
Es decir que allí Checheo tiene razón, pero ese es un caso interno de Acroarte.
En cuanto al nacionalismo que enarbolan los familiares de Acroarte, esto lo considero como parte del subdesarrollo mantenemos muchos dominicanos.
Lo internacional del Premio no hace daño en nada al origen principal del evento que reconoce a la gran Casandra Damirón, todo lo contrario internacionalizar los Casandra beneficia todo su contenido y forma.
Ahora, lo que veo mal es que el evento principal de premiación sea tomado para promocionar eventos privados y espectáculos toda vez que algunos empresarios vinculados a ese negocio son los privilegiados a la hora de invitar a sus promocionados.
Esto evidentemente se convierte entonces en un acto de promoción de conciertos y otros actos a la hora de entregar galardones a artistas que forman parte de giras y que son llevados al Teatro Nacional dizque para reonocerlos cuando en realidad lo que se hace es ayudar a algún empresario y quien sabe cuantas cosas más.
Me parece que de cerrarse la controversia entre los familiares de Casandra Damirón y Acroarte lo que se debe hacer es cambiarle el nombre a los Premios,aunque con esto se juege Acroarte el todo por el todo, porque aunque Cervecería Nacional Dominicana registro dicha marca de Premio, todo el mundo sabe que esto es originario de Acroarte y que dicha jugada se hizo debido a los errores cometidos en su momento por una directiva que quizo vender gato por liebre y que no logró nada que no fuera hacer dividir la marca del Premio entre dos.

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